El estrés postraumático es un trastorno relacionado con la ansiedad y lo sufren aquellas personas que han sido testigos o se han visto involucradas en una situación traumática y amenazante. Esta situación la han vivido con intenso terror.
La persona puede reexperimentar (vivir una y otra vez) el acontecimiento traumático a través de las siguientes formas:
- Recuerdos del acontecimiento recurrentes, en los que se incluyen imágenes, pensamientos o percepciones
- La persona tiene la sensación de que está viviendo el acontecimiento de nuevo
- Siente gran malestar al enfrentarse o exponerse a estímulos que le recuerdan el suceso traumático
- Evitan estímulos asociados al trauma
- Realizan esfuerzos para evitar pensamientos, sentimientos o conversaciones sobre el hecho traumático
- Realizan esfuerzos para evitar actividades, lugares o personas que recuerden el trauma
- Incapacidad para recordar un aspecto importante del trauma
- Reducción acusada del interés o la participación en actividades significativas
- Sensación de desapego o enajenación frente a los demás
- Restricción de la vida afectiva (p. ej., incapacidad para tener sentimientos de amor)
- Sensación de un futuro desolador (p. ej., no espera obtener un empleo, casarse, formar una familia o, en definitiva, llevar una vida normal)
- Síntomas persistentes de aumento de la activación (ausente antes del trauma): dificultad para conciliar o mantener el sueño, irritabilidad excesiva, problemas de concentración, respuesta hipervigilante y de sobresalto