La ansiedad es una emoción, al igual que lo es la tristeza, la alegría, el miedo o la ira… En muchas circunstancias, la ansiedad es una respuesta normal que emite una persona ante la percepción de una amenaza. La función que tiene la ansiedad en esa circunstancia es la de protegernos ante dicha amenaza, haciendo que evitemos la situación, salgamos corriendo o luchemos contra ella.
La ansiedad es una respuesta normal ante la percepción de una amenaza
La función de la ansiedad ante una situación de amenaza real es adaptativa y está muy relacionada con la supervivencia. Pero cuando una situación no entraña ningún peligro ni amenaza real y la persona responde como si lo fuera, es entonces cuando se desarrollan los diferentes trastornos y cuadros de ansiedad. Todas las personas que viven algún trastorno de ansiedad experimentan una sensación de intenso malestar (miedo, angustia, terror), que en muchas ocasiones puede ir acompañado de síntomas físicos y pensamientos que vive como amenazantes. En la actualidad se estima que un 20.5% o más de la población mundial sufre de algún trastorno de ansiedad.
Síntomas frecuentes de ansiedad
Somáticos
Los síntomas somáticos son síntomas físicos o psicofisiológicos que afectan al cuerpo como taquicardias, palpitaciones, falta de aire, opresión en el pecho, sensación de ahogo, sensación de nudo en la garganta, molestias gastrointestinales y digestivas, nauseas, vómitos, tensión y rigidez o debilidad muscular, exceso de cansancio, inestabilidad, mareo, insomnio, problemas de alimentación, problemas sexuales.
Subjetivos
Son síntomas subjetivos aquellos síntomas psicológicos o cognitivos como la sensación de inquietud, angustia, miedo, irascibilidad, intranquilidad, agobio, sentimientos de amenaza y peligro, miedo a perder el control, sensación de incertidumbre, sentimientos de inseguridad y problemas a la hora de tomar decisiones, miedo a volverse loco, dificultades de atención, dificultades de concentración y memoria, preocupación excesiva, sentimientos de confusión, pensamientos distorsionados e inoportunos, obsesivos o catastróficos.
Conductuales
Comportamientos poco ajustados a la situación y escasamente adaptativos como el estado general de alerta e hipervigilancia, dificultad para actuar, bloqueo, inquietud, impulsividad, posturas corporales de rigidez, movimientos torpes de manos y de brazos, tensión en la mandíbula, expresión facial de asombro, hiperactividad motora, escapar o huir de ciertas situaciones o realizar conductas como fumar o beber alcohol en exceso.
Sociales
Irritabilidad excesiva, bloqueo a la hora de comunicar o verborrea excesiva, dificultad para seguir conversaciones, temor excesivo a los conflictos, ensimismamiento.
Trastornos de ansiedad
Trastorno obsesivo compulsivo (TOC)
Fobia social o trastorno de ansiedad social
Ansiedad generalizada
Trastorno de pánico, ataques de ansiedad o crisis de angustia
Fobias
Estrés
Estrés postraumático